“El vengador tóxico” es una película de 1984 dirigida por Lloyd Kaufman y Michael Herz, que se ha convertido en un clásico del cine independiente y de serie B.
Se trata de una comedia negra que parodia el género de los superhéroes, con un protagonista que se transforma en un monstruo mutante tras caer en un barril de residuos tóxicos.
La película es una joya del cine trash, con un humor ácido, una violencia exagerada, unos efectos especiales cutres y unas interpretaciones lamentables.
Es una película que hay que ver con sentido del humor y con ganas de pasar un rato divertido y delirante o mejor no hacerlo.
Lloyd Kaufman, el genio tras la basura
Lloyd Kaufman es el director y productor de cine independiente estadounidense que fundó junto con Michael Herz la productora Troma Entertainment, especializada en películas de serie B, gore, humor negro y temática transgresora. La estética de Troma es una mezcla de elementos kitsch y de baja calidad, lo que le da a la película un aspecto distintivo que la diferencia de las producciones de Hollywood.
El bueno de Kaufman es también el presidente de la IFTA (Independent Film & Television Alliance), una asociación que defiende los intereses de los cineastas independientes.
Ha dirigido más de 30 películas, entre las que destacan “The Toxic Avenger”, “Class of Nuke ‘Em High”, “Tromeo and Juliet” y “Terror Firmer”.
Tenemos ante nosotros a todo un icono del cine de culto que ha sido reconocido por directores como Peter Jackson, Quentin Tarantino, Álex de la Iglesia y Takashi Miike.
Kaufman se caracteriza por su estilo irreverente, provocador, satírico y políticamente incorrecto, así como por su bajo presupuesto y su falta de calidad técnica. Es un genio tras la basura, capaz de crear obras originales, divertidas e inteligentes con muy pocos recursos.
El rodaje de “El vengador tóxico” fue una aventura caótica. Kaufman tuvo problemas con el sindicato de actores, que le exigía pagar a los intérpretes según el convenio y tuvo que cambiar el nombre de alguno de ellos en los créditos para evitar represalias.
El director también tuvo problemas con la policía, que le multó por rodar sin permiso en las calles de Nueva Jersey y a la que tuvo que sobornar en más de una ocasión para poder continuar con el rodaje.
¿El argumento?, absurdo ¿El reparto?, una panda de frikis
La película cuenta la historia de Melvin, un joven limpiador de un gimnasio en la ciudad de Tromaville, que es víctima de una broma cruel de unos matones.
Melvin huye despavorido y cae en un barril de residuos tóxicos, que le transforman en un monstruo mutante con superpoderes y decide usar sus nuevas habilidades para combatir el mal y limpiar la ciudad de criminales, corruptos y contaminadores.
En su cruzada, se enamora de Sara, una chica ciega que no le juzga por su aspecto. Melvin se convierte en el vengador tóxico, el héroe de Tromaville.
El reparto de “El vengador tóxico” está formado por actores desconocidos, amateurs o amigos del director, que ofrecen unas interpretaciones excesivas, caricaturescas y ridículas.
El protagonista es Mitch Cohen, que interpreta al vengador tóxico, un antihéroe que se enfrenta a los villanos más despreciables, como traficantes de drogas, asesinos, violadores y nazis.
Cohen lleva un maquillaje grotesco que le hace parecer un monstruo verde con ojos saltones y músculos hinchados. No volvió a actuar en ninguna otra película después de esta.
La coprotagonista es Andree Maranda, que interpreta a Sara, la novia ciega del vengador tóxico.
Maranda es una actriz mediocre que se limita a poner cara de sorpresa o de enamorada. Tampoco tuvo mucha carrera después de esta película.
El resto del reparto está compuesto por personajes secundarios que hacen de matones, policías corruptos, políticos sinvergüenzas o víctimas inocentes. Todos ellos son unos frikis que se prestan a las situaciones más absurdas y violentas.
Los efectos especiales, una maravilla del mal gusto
Los efectos especiales de “El vengador tóxico” son una maravilla del mal gusto, hechos con materiales caseros y rudimentarios.
La película tiene un presupuesto muy bajo y se nota en la calidad de la producción. No os equivoquéis, todo esto es parte de su encanto.
Los efectos especiales son caseros y cutres, los maquillajes son grotescos y las escenas de acción son torpes y ridículas. Todo lo que podríamos esperar en una película de estas características elevado a su máxima expresión.
La película no escatima en sangre, vísceras y tripas, que salpican la pantalla con generosidad y las escenas de gore van desde cabezas aplastadas por coches, brazos arrancados, ojos salidos por tenedores hasta cuerpos desmembrados.
Cuanto más gore mejor. Cuanto más cutre sea ese gore mejor todavía.
La recepción de la crítica, un fenómeno de culto
La recepción de la crítica de “El vengador tóxico” fue muy variada, desde el rechazo más absoluto hasta el elogio más entusiasta.
La película fue calificada como una obra obscena, repugnante, ofensiva y de mal gusto por algunos críticos, que la consideraron una basura sin valor artístico ni cinematográfico. Pero es que valorar esta película bajo la perspectiva del cine convencional es como ir a ver transformers y quejarse porque todo está hecho con CGI
Sin embargo, la película se convirtió en un fenómeno de culto entre los amantes del cine independiente y de serie B, que la disfrutaron por su humor ácido, su crítica social, su violencia exagerada y su estética kitsch.
La película tuvo un gran impacto en la cultura popular de los años 80 y su influencia se puede ver en muchas películas y programas de televisión posteriores.
Además inspiró varias secuelas, una serie de televisión y un musical de Broadway, lo que demuestra su impacto fue duradero.
Conclusión: una película para disfrutar sin pretensiones
“El vengador tóxico” es una película para disfrutar sin pretensiones, sabiendo lo que se va a ver.
Es una obra de culto que tiene su encanto y su gracia, pero que no es apta para todos los públicos. Es una película que hay que ver con sentido del humor y con ganas de pasar un rato entretenido y delirante.
No es una obra maestra ni una joya del cine, pero sí una curiosidad que merece la pena conocer. A mí me encanta “El vengador tóxico”, por mil razones diferentes. Tú tendrás que encontrar las tuyas.
Es una película que no deja indiferente a nadie y que tiene un mensaje positivo: no importa lo feo o lo raro que seas, lo importante es lo que haces por los demás. Es una película que hay que ver al menos una vez en la vida. Si hasta tiene mensaje…
- Título original: The Toxic Avenger
- Director: Michael Herz, Lloyd Kaufman
- Guion: Lloyd Kaufman, Joe Ritter
- Reparto: Mitch Cohen, Andree Maranda, Jennifer Prichard, Cindy Manion, Robert Prichard, Gary Schneider, Mark Torgl
- País: Estados Unidos
- Año: 1984
- Duración: 79 minutos
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